Alimentación con sabores

















¡Hola! ¿Cómo estás? ¿Cómo va la vida?

En atención a la semana de Bariloche a la Carta, me pareció interesante iniciar una serie de posts sobre la salud en relación a la alimentación con sabores. Quiero compartir en esta oportunidad la primera parte de un artículo de Oleg Cherne:

Las Propiedades del Gusto (1 de 2)

El gusto es una propiedad básica de la actividad de la conciencia como percepción y de las acciones en cuanto a su calidad.

El gusto, en el contexto de la alimentación, es uno de los diferentes tipos de reacciones biomecánicas, percibido por los receptores de la lengua y la mucosa de la boca.

La estructura energética de nuestros sistemas y órganos del cuerpo forman seis tipos de sabores: salado, agrio, amargo, fuerte (caliente/condimentado), dulce y mixto. Todos están determinados por las posibilidades organolépticas del organismo, es decir, la capacidad de identificar y concentrarse en un sabor particular.

El sabor es una frecuencia de característica particular, y está determinado por el ajuste de nuestra conciencia a uno de los tipos de gusto.

El gusto está conectado con la saliva, con su PH, pero no necesariamente con el producto. Nuestra saliva cambia su PH seis veces al día bajo la influencia de la actividad energética de los diferentes órganos. La necesidad de consumir uno u otro sabor determina las prioridades del gusto. Otra cosa es que el llenado por medio del gusto llegue a ser una condición necesaria para nuestro cuerpo; no es suficiente, ya que el sabor sigue estando dentro de las características de resonancia más bajas.

Identificando cinco sabores principales (salado, ácido, amargo, fuerte y dulce), encontramos un cierto modelo necesario de ingesta de alimentos donde cualquier alimento debe obedecer a los gustos y no diferir bajo ninguna circunstancia. Lo más importante es no interferir con esto.

¿Por qué tenemos que prestar atención a los gustos y comer teniendo esto en cuenta?

Continuará …

Si querés leer el artículo completo, búscalo en este link:

Hasta la próxima entrada, mientras saboreo un buen café…

Desde mi mismidad

Alejandra Lucía Rotf
Practicante del Yoga de la Alimentación

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